jueves, 7 de octubre de 2010

Institucional 1


La Ventana de Manosa no se jacta, del buen acogimiento, que la intelectualidad de turno, esa que insisten nunca pacta, con nadie más que el vulgo, hace este día y con gran honor, a una mirada no obsecuente, que con muy poco fragor, entra en escena, pues es inexistente.

Escribo, torpemente, valga o no la aclaración, estas líneas en honor a la promesa que, fernet en mano, y bajo la inmensurable nobleza del paisaje gris porteño, y la luz atenuada, de ese living sin sillón, que empuja hasta al más remolón, a sacar la nariz afuera, para dejar de aspirar, aunque sea por momentos, el viciado aire conformista, realicé a nuestro querido amigo Manosa.

Ya aclarado el origen de tan disparatado blog, lo invito querido lector, a tomarse un trago y discutir aquello que perciba, como en la caverna de Platón, desde la mágica ventana.